Mark Zuckerberg acaba de anunciar el lanzamiento del proyecto «internet.org». Es un proyecto a nivel global y su objetivo principal rata de mejorar y facilitar el acceso mundial y en todo el planeta a Internet.
El proyecto, nace fruto de un acuerdo con varias de las empresas más importantes del sector de la tecnología, como Facebook, Ericsson, MediaTek, Nokia, Opera, Qualcomm y Samsung.
Con su puesta en marcha, las compañías fundadoras de «internet.org« pretenden que el número de personas que tienen acceso a Internet en todo el mundo, que en la actualidad asciende a un tercio de la población del planeta, aumente casi el doble, llegando a la mitad del mismo, unos 5.000 millones más.
Los fundadores de internet.org desarrollarán varios proyectos de forma conjunta, entre otros, programas de sensibilización e involucración de otras empresas y estamentos públicos y/o gobiernos de varios países. En concreto, esperan conseguir la implicación de las compañías de telefonía móvil, y de hecho, conseguir esto hará que estas empresas, jueguen un papel muy importante en internet.org. En el futuro también esperan que se incorporen a esta iniciativa ONGs, instituciones académicas y expertos en la materia.
Para alcanzar sus objetivos, los integrantes de internet.org llevarán a cabo diversas acciones en países en vías de desarrollo, centradas en tres áreas: conseguir que el acceso a la red sea asequible, hacer que el uso de datos sea más eficaz y ayudar a las empresas a conseguir acceso a Internet. Para lograr el primero de ellos, los miembros del proyecto se encargarán de desarrollar y adoptar tecnologías con las que la conectividad a través de dispositivos móviles sea más económica. También se centrarán en reducir el coste de llevar los datos a todo el planeta.
Las compañías que forman parte de internet.org también apoyarán el desarrollo de nuevos modelos de negocio sostenibles, así como de servicios que faciliten el acceso a internet. Así, probarán nuevos modelos para abaratar el acceso a la red que resulten atractivos para las operadoras de telefonía móvil, los fabricantes de dispositivos o los desarrolladores de aplicaciones. También procurarán ampliar el número de idiomas en los que están disponibles los diversos sistemas operativos utilizados en dispositivos móviles, así como otros servicios relacionados con la conectividad.